¿Qué tratamiento es el mejor para la diabetes tipo 2 ?

herramientas diabetesHe notado que muchas personas que inicialmente consiguen controlar su diabetes tipo 2 haciendo ajustes en su plan de alimentación o rutina de ejercicio se sienten sumamente frustradas y culpables cuando el médico les prescribe medicamentos o insulina. Hay quienes se sienten tristes, temerosos y creen que el requerir de algún medicamento significa que se han fallado a sí mismos. Y quiero decirles que ¡eso no es así!

Tu diseñas tu vida

A mí me encantan las herramientas, como sabrán, estudié la apasionante licenciatura en diseño industrial, y ahí conocí muchos artefactos desde pinzas, desarmadores, seguetas, hasta grandes sierras, tornos y soldadoras, en una palabra: ¡apasionante! Desde entonces aprendí a no tenerle miedo a las cosas que me ayudan a realizar lo que imagino, pero también supe que algunas herramientas como la enorme sierra circular para madera (no les quiero contar cómo la apodábamos, usen su imaginación) , necesitan algunas precauciones y conocimientos especiales para utilizarlas con seguridad y conseguir construir mis diseños (que finalmente era el objetivo y lo más divertido del asunto), después de conocerla y aprender a utilizarla no era tan temible. Algo parecido ocurre cuando tenemos diabetes.

La meta para poder vivir bien con diabetes es mantener los niveles de glucosa en los rangos adecuados, lo más parecido a como los mantiene una persona sin diabetes. Para conseguirlo tenemos muchas herramientas.

Si mi diseño requiere apretar un tornillo de forma de cruz, quizá empecé a enroscarlo dándole vueltas manualmente y funcionó muy bien, pero llegó el momento en que necesité un desarmador y empecé a darle vuelta con uno de punta plana que encajaba y me ayudó por un tiempo, hasta que la cabecita del tornillo se desgastó y el desarmador de forma plana ya no da vuelta igual que antes. Si en mi caja de herramientas tengo un desarmador de cruz y el experto en el taller me ayuda a elegir el del tamaño apropiado y me enseña cómo utilizarlo… ¿habría un motivo para sentirme frustrada?  Si mi objetivo es apretar ese tornillo, no deshacerme las uñas para, a pesar de mis esfuerzos, dejarlo siempre flojo y que mi diseño corra el riesgo de desmoronarse con una brisa…

Pues lo mismo con las herramientas para mantener la glucosa en rango. Existe una gran variedad, y cada persona necesita una combinación particular que requiere ajustes, cambios, mantenimiento. Las herramientas base son el aprendizaje sobre la diabetes y cómo mantener los niveles de glucosa en rango, pero hay muchas otras que también puedo conocer y aprender a manipular, para eso contamos con especialistas que pueden orientarnos. En el taller de diseño siempre había un experto a quien acudir para obtener su orientación y guía, pero no había un proyecto igual a otro, cada uno tenía su reto y dentro o fuera del taller mi diseño era mi responsabilidad, los tornillos los aprieto yo.

Es muy importante reconocer que el tipo de herramientas que cada persona con diabetes tipo 2 necesita para mantener su glucosa en el rango meta no significa que “se porta bien o se porta mal”, ” tiene diabetes de la buena o de la mala”, “su diabetes está empeorando” …  nada más lejano a la realidad.

¿Cuál es la realidad entonces?

La diabetes tipo 2  evoluciona, cambia con el paso del tiempo y esto es distinto en cada persona por muchos factores. En algunos, por un tiempo, los cambios en la alimentación y el hacer ejercicio pueden ayudar, pero hasta la persona más disciplinada y estricta con su plan de alimentación que puedan imaginar puede necesitar otros instrumentos para conseguir sus metas.  Las herramientas no son premios o castigos, insisto, son sencillamente medios para conseguir nuestro objetivo: mantener la glucosa en rango y vivir bien con diabetes.

[quote align=”center” color=”#333333″]Las herramientas son solo herramientas, podemos aprender a utilizarlas, perfeccionar nuestras técnicas, ayudarnos de nuevos instrumentos y darles mantenimiento con ayuda de expertos[/quote]

Si yo pude vencer el miedo a la desconocida sierra circular (créanme daba miedo y mucho), aprender junto con los profesores y encargados del taller cómo utilizarla con seguridad, ponerme un casco para soldar y construir hasta pantuflas de madera… Yo creo que todas las personas con diabetes tipo 2 pueden aprender sobre alimentación, medicamentos e insulina, aprender junto con los educadores en diabetes y profesionales de la salud cómo ajustarlos y encontrar la mejor combinación, así el diseño de sus vidas no tiene porqué desmoronarse…

¡Qué consigas convertir tus propósitos en realidades!

esferita cuadradaEs mi deseo  en este 2013, como dice el título de este primer post, que consigas convertir tus propósitos en realidades. Cuando tomamos la decisión de transformar nuestros sueños en metas se convierten en algo factible y algo así es lo que solemos hacer cada fin de año cuando enlistamos nuestros propósitos.

Los  12 deseos que tradicionalmente visualizamos mientras masticamos las uvas o escuchamos las 12 campanadas del reloj tienen la mágica cualidad de que pueden ser cosas totalmente irreales o con pocas probabilidades de realizarse a corto plazo, como desear que ganaremos el premio mayor de la lotería y viajaremos sin parar por cada rincón del mundo sin reparar en gastos. Puedo desear que  en 2013 fabriquen un borrador milagroso que quite arrugas, o que con solo mover la nariz como en la serie de televisión de Hechizada mi closet quede ordenado por colores, tamaños y prendas y que ademàs en ese minúsculo metro cuadrado quepan todos los zapatos. También puedo desear que este año encuentren la cura de la diabetes,  tengo 12  “ding dong ” para pensar en lo que yo quiera. Claro que aprovecho los 12 deseos, como muchos, es una oportunidad cada 365 días de frotar la lámpara del genio y que al menos algunos de ellos se realicen.

Pero me gusta concentrar mi energía en los propósitos, porque si los formulo a conciencia resulta que tengo el poder en mis manos de convertirlos en realidades.

¿Cómo formular un propósito? Este año entendí que hay que transformar los sueños o deseos en metas. A principios de 2011 empecé a dar sesiones de educación en diabetes ( en mis tiempos “libres”) no resultó como yo esperaba. A principios de 2012 empecé un blog, escribí un solo post y nada más, tenía el deseo de dedicarme a la educación en diabetes y de escribir un blog pero no me dí el tiempo necesario para hacerlo – ¿ a qué hora podré dar sesiones de educación en diabetes con la carga de trabajo que tengo? ¡no me da tiempo de escribir un blog!  ¿de dónde saco más tiempo? – me decía. ¿Les suena? estas son algunas de las respuestas más comunes que nos damos cuando no conseguimos algo que queremos como nos lo imaginamos, pues resulta que por fin comprendí que todas las personas que vivimos en este planeta tenemos días de 24 horas, lo que decidimos hacer con esas 24 horas es asunto de cada uno.  Para no hacerles el cuento largo,  hice una profunda reflexión personal sobre en qué decido invertir mi tiempo y este año me propuse reestructurar mis actividades y el tiempo que invierto en cada una para: darme tiempo.  Claro que tomé importantes decisiones de cosas que dejar como bastantes horas de docencia, para dedicarlas a la educación en diabetes, la investigación, mi familia y muy importante: tiempo para mí misma, según mi plan contemplé tiempo hasta para mi adorado baile flamenco. Como todo propósito lleva su gran carga de reto personal, pero todo es parte de la aventura.

Este es mi propósito: darme tiempo para realizar las metas que decidí proponerme y respetar el tiempo que me doy para que los demás también lo respeten, porque está en mis manos el poder de convertirlo en realidad.

Y mi deseo es que todos ustedes consigan realizar lo que se proponen,porque  el poder está en sus manos.